Curso de Misionología en las Obras Misionales Pontificias



Buenos Aires (AICA): Las Obras Misionales Pontificias (OMP) de la Argentina ofrecen, desde el año 1982, un Curso de Misionología a los agentes de pastoral de la Argentina y de otros países, que deseen profundizar en su compromiso como discípulos misioneros de Jesús al servicio de toda la Iglesia. El 32º Curso de Misionología se llevó a cabo en la sede nacional de la OMP, dirigido por el presbítero Dante Mario De Sanzzi, director nacional de las OMP en la Argentina.

Las Obras Misionales Pontificias (OMP) de la Argentina ofrecen, desde el año 1982, un Curso de Misionología a los agentes de pastoral de la Argentina y de otros países, que deseen profundizar en su compromiso como discípulos misioneros de Jesús al servicio de toda la Iglesia.

En su propuesta del Curso intensivo presencial de la formación misionera tiene presente los cuatro ejes que propone el documento final de Aparecida para un mayor compromiso misionero: experiencia religiosa, vivencia comunitaria, formación bíblico–doctrinal y compromiso misionero de toda la comunidad.


En la apertura del 32º Curso de Misionología, que se llevó a cabo en la sede nacional de las Obras Misionales Pontificias en Buenos Aires, estuvieron presentes, junto al director presbítero Dante Mario De Sanzzi, el director de las OMP del Uruguay, presbítero Leonardo Rodríguez; el secretario nacional de la Pontificia Unión Misional (PUM), presbítero Pedro Manuel Brassesco; el secretario nacional de la Infancia y Adolescencia Misionera del Brasil, presbítero André Negreiros y la directora del Centro de Misionología Juan Pablo II, hermana Sonia Zbrun.


Luego de la presentación de los participantes de diferentes diócesis de la Argentina más alumnos de Venezuela y del Brasil, se leyó la cita del profeta Isaías (55,10-11) para luego en silencio reverenciar la palabra con el gesto de tomarla entre las manos y escucharla en comunidad: “Así como la lluvia y la nieve descienden del cielo y no vuelven a él sin haber empapado la tierra, sin haberla fecundado y hecho germinar, para que dé la semilla al sembrador y el pan al que come, así sucede con la Palabra que sale de mi boca: ella no vuelve a mí estéril, sino que realiza todo lo que yo quiero y cumple la misión que yo le encomendé”.


A partir de este texto bíblico el padre De Sanzzi reflexionó: “Las palabras del profeta Isaías sirvan para nuestro Curso y para estos días que estamos viviendo. La palabra de Dios tiene que ser como la lluvia que cuando cae en la tierra no es que vuelve para arriba sino que queda en la tierra porque la tierra la hace trabajar, después se transforma en una semilla que tiene que dar alimento a la gente, a los animales, a toda la creación. Así tiene que ser mi Palabra dice el Señor.


Y continuó: “La lluvia transforma a la tierra, que este curso nos transforme a nosotros también. Por eso el lema es: ‘Invitados a creer en la fuerza transformadora del Evangelio’. Que esa transformación del evangelio sirva para nuestra vida también, creamos en la fuerza de la palabra de Dios. Si cuando envío la lluvia a la tierra, dice el Señor, no vuelve a mí, de la misma manera tiene que ser la Palabra y lo que vivamos.


“Si las materias que tengamos y las enseñanzas que recibamos no nos transforman en este tiempo es porque hay algo en mí que no está bien. A eso estamos invitados en estos días, a que tengamos esa fuerza que Dios dice que tenemos que tener”, añadió el padre De Sanzzi.


Por último el director nacional de las OMP recomendó no tomar “a este curso de misionología como materias que venimos a aprobar, no es ese el sentido. El sentido está en que yo me transforme a partir de la misión que Dios me pide. Po eso tengo que abrir los oídos y el corazón. Ojalá que este tiempo sea como la lluvia, que sea una lluvia de gracia para mi formación, para mi animación, para mi vida misionera”.


Por la noche se llevó a cabo la celebración eucarística que presidió el padre De Sanzzi y concelebraron sacerdotes de Corrientes, Tucumán, Formosa, Gualeguaychú y de los países hermanos del Brasil y del Uruguay.


En su homilía el padre Dante De Sanzzi rescató la exhortación de “poner el corazón en el evangelio y que la misión tiene que ser de persona a persona, el contacto con el otro como el Señor lo enseñó, como Samuel en el Antiguo Testamento, un elegido visionario de Dios, le enseñaba a Saúl: andá al contacto con el otro, hablale de Yahvé. Nosotros hablemos de Dios, esta es la materia que tenemos que aprobar, que le hablemos de un Dios bueno al otro, no del Dios justiciero. A veces las misiones fracasan por el mal testimonio que damos y porque la línea que bajamos no es la línea del Señor. Entonces la misión se esfuma, nos cansamos, nos desganamos, miramos mal al otro, decimos que no nos dan los tiempos, decimos que no servimos. Vos tenés que llevar la Palabra, a eso te está enviando”.


Exhortación apostólica Evangelii Gaudium.

En el marco del 32º Curso de Misionología del Cono Sur, este año se estudió la posibilidad de que los cursantes adquieran conocimiento e interés en la exhortación que el papa Francisco hace sobre la importancia de la Iglesia misionera y el descubrir la misión del cristiano en sus ambientes.


Por eso, junto a las demás cátedras brindadas, se agregó el tema de la Evangelii Gaudium, de gran interés para reflexionar sobre el tema misionero, que abre las puertas para recibir e ir en busca de los que necesitan el anuncio del gozo del Evangelio, y para saber cómo evangelizar en el mundo actual.


Informes: comunicacion@ompargentina.org.ar +



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