Mons. Canecín visitó la Fazenda de la Esperanza
Durante la celebración eucarística, monseñor Canecín reflexionó sobre el pasaje del Evangelio que relata las bodas de Caná, en el que Jesús convierte el agua en vino.
A manera de introducción, el obispo destacó que después del tiempo de Navidad y de la Epifaní del Señora, y antes de llegar a la Cuaresma, se intercala un tiempo intermedio en la liturgia de los domingos. El Evangelio de hoy, detalló, nos propone el relato de las bodas de Caná como “el primer signo que Jesús hace” y que anuncia “tiempos mesiánicos”, y viene lo nuevo, todo aquello que Jesús realizará en su existencia.
El prelado recordó que un mes atrás celebramos el nacimiento de Jesús, que se manifiesta como “Dios para todo el género humano” y señaló también que el 6 de enero celebramos la Epifanía del Señor que significa “manifestación”, ya que en el pesebre se manifestó como “Dios para todo el género humano”.
“El pueblo pagano de oriente representado en los magos presentó oro, incienso y mirra, una celebración muy bonita que nos quiere decir que Dios es de todos los hombres, de ayer, hoy y siempre”, explicó. “Dios es Padre de todos y para todos, porque Dios quiere que todos los hombres se salven”, afirmó.
Por otra parte, y en referencia al Bautismo del Señor, recordó la voz del Padre diciendo “este es mi hijo muy amado”, el Espíritu en forma de paloma y el Hijo que sale del agua: “Una auténtica Epifanía, una verdadera manifestación de Dios” sostuvo monseñor Canecín.
Este domingo, concluyó, “Dios se manifiesta para despertar nuestra adhesión a través de la fe y esto es lo que el Señor quiso y quiere, esta es la voluntad del Padre, como nos dice Jesús 'que ustedes conozcan y vean al Hijo único que luz y es pan, porque no hay otro nombre dado a este mundo para alcanzar la salud y la vida eterna’”.
La Fazenda
En la diócesis de Goya, la Fazenda femenina de la Esperanza “Nuestra Señora de Itatí”, está situada a dos kilómetros de la entrada norte de Santa Lucía, departamento de Lavalle, en la Provincia de Corrientes.
“Fazenda de la Esperanza” es una asociación de fieles reconocida por la Iglesia católica que se dedica principalmente a la recuperación de jóvenes químico-dependientes. Su historia fundacional se remonta a Nelson Giovanelli, quien se acercó a un grupo de jóvenes que consumían y vendían drogas cerca de su casa.+
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